JEREMIAS ISRAEL DAKAR 2013

JEREMIAS ISRAEL SE LA JUEGA POR LLEGAR A LA META DEL DAKAR 2013

El día fue demasiado largo para muchos competidores. Jeremías está satisfecho de haber logrado terminar y tal como dijo, de "Haber sobrevivido" a este día. 

Luego de la caída sufrida ayer, Jeremías Israel finaliza la décima etapa del Dakar en la décimo octava posición. El piloto ocupa el décimo puesto en la clasificación general provisional y dejará el puesto de elite para manejar su carrera. La novena etapa del Dakar causó estragos en los competidores. Hoy, en la jornada entre Córdoba y La Rioja, el Dakar cambió de ritmo, otorgando a los pilotos la oportunidad de recorrer pistas rápidas y técnicas en gran parte de la especial. Jeremías Israel inició el tramo cronometrado en el puesto número 25 después de su accidente ayer. En una etapa liderada por Joan Barreda, el piloto VTR Honda Procircuit Publimetro escaló posiciones y cruzó los dos controles de paso de la especial en la décimo novena posición. Barreda se adjudicó su cuarta victoria de etapa en el Dakar 2013. Gracias al manejo y control que logró demostrar en la jornada, Jeremías finalizó la décima etapa en la décimo octava posición provisional y así mismo mantiene su décimo puesto en la clasificación general provisional bajo el mando de Cyril Despres. “Fue una etapa larga y había algunos caminos como los de ayer. Había mucho polvo y eso siempre lo hace más complicado, además fue la etapa después del golpe… Me costaba mantener la concentración y me dolía la cabeza, pero no sé si por la caída o por el exceso de calor. En la especial habían 49 grados,” cuenta Jeremías desde el bivouac en La Rioja. El piloto está conforme con su desempeño en la décima jornada de carrera. “Venía pensando y creo que la caída fue una señal importante. Tuve mucha suerte, no salí lesionado y pude seguir. Los 200 kilómetros después del golpe se sintieron muy densos ayer. Estoy contento de seguir en carrera,” confiesa el piloto. Como estrategia para las próximas duras etapas de dunas y calor que deberá enfrentar en los próximos días, su mecánico, Marcelo Verdugo, decidió cambiar el motor. “Sé que tomaré una penalización de 15 minutos y que saldré de los top 10, pero apoyo y respeto lo que Marcelo diga que es mejor. Yo soy el que arriesga el pellejo arriba de la moto y él es el que sabe cómo va la máquina. Somos equipo. Los dos estamos claros que la meta es llegar a Santiago y en todos los aspectos que podamos asegurar la llegada a la meta, tenemos que poner acción. Todavía la carrera no se acaba, quedan muchos kilómetros por delante.” Mañana los pilotos enfrentarán una de las etapas más temidas de la 35 edición del Dakar. Las dunas grises de Fiambalá y una exigente navegación serán parte de los ingredientes de la undécima jornada de carrera.